miércoles, 26 de junio de 2013

Mi "miniyo"

A veces no hay próxima vez, a veces no hay segundas oportunidades, a veces es ahora o nunca... Y podríamos decir que para mí es un nunca. Simplemente me cansé de esperar algo de alguien que sólo buscaba una pared sólida en la que apoyarse sin pretender dar nada a cambio, y eso desgasta mucho. Pero entonces encuentras algo que sí merece la pena, lo recibes con miedo porque no quieres volver a pasarlo igual de mal, pero vas descubriendo poco a poco que las cosas no tienen que ser como han sido hasta ahora, que hay nuevas puertas, nuevas ventanas, hacia un mundo con un punto de vista muy diferente, más humano y menos egocéntrico, en el que esa persona se preocupa por ti tanto como tú por ella, en el que esa persona se apoya en ti sin dejar de dar a cambio continuamente. Y eso, al menos a mí, me hace muy feliz.

Igual a veces deberíamos ser un poco más exquisitos al escoger alguien con quien compartir nuestra vida, pensar seriamente si esa persona es la adecuada... El problema es hacerlo, que tu "miniyo" interior te lo grite y tú no lo ignores, como por desgracia me ha pasado tantísimas veces... Pero es que esta vez pinta todo tan diferente, todo tan inocente y sincero que no tengo una vocecilla interior que me diga "pero es que...". Al revés, soy yo en mi propia conciencia el que intento ponerme excusas por miedo a volver a lanzarme tan rápido al abismo, y es esta vez mi yo interior el que me grita que me lance, que merecerá la pena... Igual va siendo hora de escuchar a mi "miniyo"...

No hay comentarios:

Publicar un comentario